El pasado domingo corrí por primera vez un duatlón por relevos. Yo realicé los dos recorridos a pie y mi padre el recorrido en BTT.
El objetivo de esta carrera era ir cogiendo ritmo y encontrar sensaciones de cara a la temporada de invierno. La primera parte de la prueba constaba de 5600 metros, en los cuales me encontré bastante mejor de lo que me imaginaba, por lo que finalicé muy muy contenta.
A continuación le di el relevo a mi padre, y para finalizar recorrí los últimos 2800 metros, en los que mis piernas pagaron el esfuerzo anterior, pero a pesar de ello me encontré dentro de lo previsto.
En definitiva, ha sido una gran toma de contacto en la que he ganado ritmo, sensaciones y sobretodo confianza.
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